Disclaimer: Aquà otro post sobre el iPhone de alguien que nunca ha tenido uno y que habla por percepción subjetiva
No quiero hablar del triunfo inmediato de ventas (o por lo menos de deseo de compra) del nuevo juguetito de Apple, sino de por qué a mà me parece que la experiencia de usuario a medio plazo será muy satisfactoria.
Hay multitud de alternativas móviles al iPhone con todas o la mayorÃa de las funciones que éste ofrece, pero la gran diferencia es que el iPhone es único, y no me refiero a su exclusividad (sin negarla) me refiero a que es UNO y no hay más.
Todo iPhone es igual a otro (más allá de colores y espacio de almacenamiento), misma pantalla, misma interface de usuario, misma capacidad de rendimiento, mismos periféricos integrados, …
Esto puede interpretarse como una limitación comercial, y puede que asà sea, pero las ventajas a medio plazo son arrasadoras.
Nunca ha ocurrido esto antes con un dispositivo móvil, nunca antes un compañÃa ha tenido la suficiente fuerza de asimilar el riesgo competitivo de poner todos los huevos en un sólo cesto, han preferido la diversidad, un extenso catálogo dónde cada cliente encuentre el móvil que le encaje.
Ahora Apple cambia las tornas y saca un solo producto, porque sólo ella tiene la suficiente fuerza hipnotizadora para convencer al cliente de encajar en el móvil y no al revés.
Entonces tenemos el iPhone, y nada más, no hay iPhone XP45, ni iPhone 320, ni iPhone++ (aunque sà hay dos modelos de iPhone y se empieza a romper mi teorÃa, pero en cualquier caso el anterior ha desaparecido de facto de la faz del mercado y es como si ya nunca hubiera existido).
Desde el punto de vista del mundo de los desarrolladores es como si se les contara un cuento de fantasÃa: desarrollarás aplicaciones para un solo dispositivo con unas caracterÃsticas únicas y conocidas.
Desde el punto de vista del usuario identificará rápidamente cualquier aplicación, periférico o información que tenga que ver con su móvil, con sólo ver la etiqueta iPhone. Una vez encontrado lo que necesita sabrá que encajará perfectamente con su dispositivo, que no habrá ningún tipo de incompatibilidad y que se usará siguiendo unas pautas comunes con el resto de aplicaciones.
El gran fracaso, a mi entender, del desarrollo de tecnologÃa móvil, ya sea aplicaciones o experiencia web, ha sido precisamente la diversidad. Yo nunca me he conseguido descargar una aplicación de Internet que funcione correctamente en mi móvil, sin contar además todas las vueltas que he tenido que dar para, no sólo encontrar la aplicación, sino luego encontrar la versión que se suponÃa compatible con mi dispositivo.
La gran frustración de los desarrolladores los ha llevado en la mayorÃa de los casos a desarrollar para el mÃnimo común denominador generando asà productos que nunca explotan (respetan) las caracterÃsticas de cada dispositivo en concreto.
Sabiamente dice Yoshida (presidente de los estudios de Sony):
Lo ideal son los juegos adaptados a los controles de la máquina.
Me recuerda esto a mi experiencia MSX cuando era pequeño, y veÃa que muchos de los videojuegos que tenÃa no utilizaban la gran capacidad gráfica y de sonido que esta máquina tenÃa. Los últimos tÃtulos se veÃa claramente como los habÃan desarrollado para Spectrum y los habÃan clonado cutremente a MSX.
Es por todo esto que no confÃo tanto en el éxito del formato Android. Hace poco estuve en una charla en la que exponÃan las bondades del SO para móbiles con el que Google quiere revolucionar este mundo, y tuve una pequeña discrepancia con el ponente a propósito de esto mismo: ¿la diversidad de dispositivos y de caracterÃsticas de los mismos es un pro o un contra?.
No sólo me parece un contra para el usuario, también para los desarrolladores, para el fabricante de dispositivos y para el mismo desarrollador del SO: cuánto más fácil lo tendrÃan si tuvieran bien claras las especificaciones de la plataforma sobre la que el SO va a correr.
Sólo creo que Android podrá revolucionar algo si dentro de sus especificaciones incluye una serie muy concreta de especificaciones de hardware.
Ahora bien, espero que Telefónica fracase con sus abusivas condiciones de venta, y si Apple está de acuerdo pues que se vayan a la mierda juntas.